miércoles, noviembre 1

Perseveraban unánimes en oración y ruego

El libro de los hechos es un libro histórico, no es el fundamento para la iglesia. Desde luego, ya quisiéramos ser nosotros como los creyentes del 1er siglo. Pero eso no implica que el libro fuese escrito para la iglesia.

1. Lucas hizo de investigador para relatar la historia de los hechos acontecidos desde la muerte de Cristo en la cruz hasta que el evangelio llegó a Roma a través de Pablo. Luc.1:1-4 LEER
—De eso ya habla en su primer tratado.

2. Lucas, así mismo, tenía el propósito de dejar claro que lo que se le había dicho y enseñado a Teófilo eran tal cual.

3. Los creyentes iban a la sinagoga.
—Nosotros no vamos a las sinagogas.

4. El Señor no actúa como lo hizo entonces.
—El caso de Ananías y Safira.
—Si el Señor continuase obrando así entre nosotros, muchos estaríamos heridos o muertos.

No obstante si se nos habla de cosas que la iglesia sigue necesitando: Por eje. La oración.
Creo que es el libro que más ejemplos nos pone sobre este tema tan importante. La iglesia primitiva era una iglesia que oraba. —Vemos al menos 19 casos de oración. En el capítulo 1 se nos habla del primer caso.

Después de pasar los últimos 40 días con el Señor Jesús, se pusieron a orar.

Hch.1:13-14

“Y entrados, subieron al aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano de Jacobo. Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos”.

Esta fue la primera Conferencia de Oración. —¡Y no fue de 24 horas, sino de diez días!
¡Qué tiempo tan precioso debió ser aquel!

¿Os imagináis escuchar al apóstol Pedro orando? – Al apóstol Juan – A María?
Hubiese sido una gran bendición estar allí con ellos orando por:

1. Las almas perdidas.
Rudos soldados, mujeres y niños fueron salvos.

2. La venida de la promesa que el Padre les había dado. — El Espíritu Santo.

3. La preparación de sus corazones.

Han pasado casi 2.000 años desde aquella reunión de oración. Y nosotros debemos seguir orando prácticamente por las mismas cosas:

1. Debemos seguir orando por las almas perdidas. — Ver el Boletín.
2. Por la venida de la promesa.
Ellos esperaban la venida del Espíritu Santo que les había sido prometido. Nosotros esperamos la venida de Cristo a por su Iglesia, tal como nos ha prometido.
3. Por la preparación de nuestros corazones.
Un día no muy lejano el Señor ha de venir a buscarnos y debemos estar preparados para nuestro encuentro con Él. No sea que nos tengamos que alejar de él avergonzados.

1Jn 2:28

“Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste, tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados”.

Hnos. aquellos creyentes estaban reunidos perseverando en la oración y ruego.

Hch.1:14

“Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego”.

Estaban unidos (Unánimes) en la oración y ruego.
Pienso que pocas cosas unen más a una iglesia que el orar juntos. Esta es nuestra enseñanza: Debemos perseverar unánimes en oración y ruego.

No sé por qué los cultos de oración siempre son los más escasos en asistencia.
¿Cuándo ha sido más necesario perseverar en la oración que en nuestros días?